Junts pel Sí y la CUP acaban de presentar una propuesta al Parlamento
de Cataluña para iniciar la creación del Estado catalán y así provocar la
ruptura y separación del resto de España.
Confieso que no me gusta la independencia de Cataluña de España y ya lo
dije el día uno de Octubre pasado en éste mismo blog, pero reconozco que sigue
siendo un gusto particular; igual que no entiendo el por qué una buena parte de
la población catalana lo desea por encima de casi todo, tragando
incluso con un partido que se ha estado dedicando, entre otras cosas, a robar a
todos los catalanes como estamos viendo en los telediarios
Pero lo que veo en la otra parte, “la nuestra” por así decirlo, no me
tranquiliza nada.
¿Cuál ha sido la primera reacción del resto de los partidos? Pues muy
parecida en todos: de momento, apoyar la unidad de España y expresarlo con
firmeza, convicción, tranquilidad y mesura, que está muy bien.
Entonces, ¿Qué es lo que, a mi juicio, ha faltado?: Ni más, ni menos,
que hubieran salido sus dirigentes JUNTOS, con una proclama consensuada e
integradora que evidencie lo que les une (lo que nos une), que es mucho. ¿La
tendremos? Mal empezamos. Al menos hoy no será.
¿Conseguirán los partidos que defienden la unidad de España no hacer
del tema de la independencia de Cataluña un nuevo terreno de confrontación
electoral, de lucha entre ellos? Por desgracia, no apostaría por ello. Veremos
cómo se adoptan perfiles duros por unos, que menospreciarán a otros más
abiertos al entendimiento en el desacuerdo y a éstos últimos desacreditar a los
más intransigentes cerrando así el círculo vicioso de los defectos patrios que
se retroalimentan continuamente.
Y mira que me gustaría
equivocarme.
Garganta de
los Montes (Madrid), 27 de Octubre de 2015